Page 208 - Diplomacia
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3er. Congreso Internacional del
Deporte y la Cultura Física
influida por una combinación de factores tales como su vida en casa, género,
etnia y estatus económico, entre otros. Por ejemplo, se ha asociado firmemente
al estatus socioeconómico con la conducta delictiva, de manera que es más
probable que los jóvenes que han crecido en las áreas más pobres tiendan
–pero no es un hecho seguro—a romper la ley (Connelly, Lewis y Boisvert,
2017). Por lo tanto, tiene sentido que, cuando las condiciones cotidianas de las
personas jóvenes son la indigencia, la pobreza o la impotencia, se considere
a la violencia o a la delincuencia como una salida (Roberts, 2019). Por otro
lado, frecuentemente los hombres jóvenes que están en prisión y la gente
joven involucrada en actividades delictivas han sufrido condiciones de vida
inestables, tales como haber crecido con un solo padre o con un familiar o
haber tenido relaciones filiales nocivas (Holligan, 2015; Pitts, 2020). Aún más,
si los padres de alguien tienen o llevan consigo un arma, ese hijo es más
probable que también lleve una, en comparación con los padres que no
tienen ni llevan consigo armas (Yun y Hwang , 2011).
La etnia también puede predeterminar que una persona joven sea
delincuente o víctima de un crimen con arma blanca. En el Reino Unido, los
individuos negros, asiáticos y pertenecientes a una minoría étnica tienen más
probabilidades de cometer o ser víctimas de algún delito en comparación
con los individuos blancos (Pitts, 2020). Desafortunadamente, el hecho de
que los delincuentes negros, asiáticos y pertenecientes a una minoría étnica
estén representados de una manera desproporcionada en las estadísticas se
ha relacionado con un incremento en el racismo y la xenofobia, lo que vuelve
más probable que la policía se enfoque en individuos de estos grupos y los
arreste (Wood. 2010). Esto se basa en el hecho de que los individuos negros
tienen cuatro veces más probabilidades de que los detengan y registren que
los blancos (ONS, 2019). Wood (2010) lo plantea de la siguiente manera: “Si se
es pobre y se viene de un entorno desfavorable, se tienen más probabilidades
de quedar atrapado en un ciclo de violencia; si se pertenece a un grupo
étnico minoritario o se es negro o refugiado, se potencia este riesgo.” Esta
información es importante para las intervenciones deportivas que van
dirigidas a la prevención de la delincuencia y la violencia porque los grupos
de individuos negros, asiáticos y pertenecientes a una minoría étnica tienden
más a exponerse o estar relacionados con la delincuencia y/o violencia con
arma blanca.
Experiencias negativas
Algunos estudiosos han señalado experiencias negativas como la exclusión
como un motivador potencial para que la gente joven se involucre en la violencia
o en la delincuencia (Roberts, 2019; Squires, 2009). Los delincuentes jóvenes
tienden a pensar que nadie se preocupa por ellos, especialmente si tienen en
su casa una forma de vida inestable. Como consecuencia, quienes se sienten
vulnerables y marginados ven a las pandillas locales y a la delincuencia y la
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