Para ellos, el baile es un estilo de vida y el teatro es su pasión. La suma de ambos, mezclada con los ritmos caribeños de Aguanile, otorgaron a Sandra Gamboa Castrejón y Ricardo Martínez Burgos el segundo lugar de la modalidad Salsa en Línea dentro del Campeonato Nacional de Salsa y Danza Deportiva, celebrado en el Polivalente Futurama, de la Ciudad de México.  

Ambos bailarines, de 23 años y egresados de la carrera de Teatro en Filosofía, se enfrentaron a las mejores 16 parejas del país en tres etapas, en las cuales demostraron la técnica y acrobacias que han pulido a lo largo de dos años y medio de trabajar juntos.

En la competencia se evaluaron aspectos como tiempo musical (que no debe exceder mas de dos minutos y medio), desempeño en pareja, técnica, vestuario, dificultad en acrobacias así como la pulcritud al  momento de ejecutarlas.

De esta manera, el dúo puma sólo fue superado por Juan Pablo Navarro y Viviana Arreola, de Guanajuato, mientras que en tercer sitio se ubicó el binomio de Tamaulipas, integrado por Edgar Pérez y Guadalupe Reyes.

“Desde un principio notamos que la competencia era de un altísimo nivel pues en cada una de las tres etapas debíamos dar nuestro máximo esfuerzo, además de que nunca supimos si se sumarían las calificaciones de cada etapa o se haría un promedio de todas. Saltamos a la pista con la intención de conseguir un buen lugar, y afortunadamente así fue”, señaló Sandra Gamboa.

Por su parte, Ricardo Martínez aseguró que el segundo lugar los deja satisfechos, pues hicieron una excelente competencia; no obstante, señaló que durante la misma “quizá nos faltó arriesgarnos más en cuanto a la dificultad del nivel coreográfico. Realmente fue justo que los de Guanajuato ganaran”.

Aguanile, Aguanile, Mai Mai

Para este Nacional, tanto Sandra como Ricardo quisieron imprimirle un sello diferente a su participación. Aguanile fue la canción que eligieron para bailar y ambos decidieron investigar un poco más sobre ella.

Dicha pieza musical, compuesta por el salsero puertorriqueño Héctor Lavoe, hace referencia a un canto santero (dioses Orishas) denominado aguanileo, que se ofrece a Ogun, dios del hierro, las guerras y las faenas. “La bailamos por primera vez en una presentación la Facultad de Ciencias Políticas y partir de ahí nos adentramos en la canción, pues hicimos una pequeña investigación sobre ella porque queríamos mostrar algo más elaborado y mas artístico, no solo un movimiento.  Es como una obra de teatro bailada pues hasta el vestuario tiene que ver con la canción”, refirió Ricardo.

A pesar que en un campeonato nacional la participación de una pareja se reduce a dos minutos y medio de baile, hay un trabajo arduo de meses para preparar la presentación, que va desde la selección de la canción hasta montar la coreografía, así como el vestuario; no obstante, al momento de estar parado frente al público la mente juega un papel muy importante

“Básicamente es la preparación mental, pues la técnica artística siempre la llevamos a cabo. Cuando sabemos que vamos a competir tratamos de enfocarnos, en ese momento, a bailar lo mejor posible, sin errores y con mucha comunicación. La mente es un factor que debemos controlar pues nos da seguridad, claridad y tranquilidad. Es fundamental concentrarnos en lo que sabemos hacer”, explicó Sandra.

Por lo pronto ambos han cerrado la temporada, competitivamente hablando, pues continuarán con su trabajo dentro de una compañía de teatro, así como con algunas presentaciones de salsa en diferentes foros, lo cual demuestra que han podido conjuntar de manera perfecta sus dos grandes pasiones: baile y teatro.

“Es un orgullo representar a la UNAM y competir por ella, es una gran satisfacción estar en el equipo de la Máxima Casa de Estudios, que nos dio la oportunidad de crecer profesionalmente. El baile es un estilo de vida que nos encanta pues desde las 10:00 horas hasta las dos de la madrugada nos la pasamos bailando, es algo que ya no podemos dejar”, puntualizó Sandra Gamboa.