Una cosecha de 18 preseas: nueve de oro, seis de plata y tres de bronce, fue el saldo que los deportistas pumas tuvieron en los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2010, celebrados en Mayagüez, Puerto Rico, del 18 al 31 de julio, donde Aída Román Arroyo, de tiro con arco, se consagró como la atleta más destacada del contingente puma y la segunda de toda la delegación mexicana.

Y es que la arquera auriazul tuvo una cosecha personal de ocho metales: siete de oro por una plata, sólo superada por su compañero de equipo Juan René Serrano, quien logró en total ocho oros en la justa.

Aída logró sus metales áureos en las modalidades de arco recurvo en distancias de 30, 50, 60 y 70 metros, en el ranking FITA (Federación Internacional de Tiro con Arco), así como en la prueba individual y la de equipos mixtos arco recurvo. Por lo que respecta a la plata, ésta la obtuvo en arco recurvo por equipos.

Por si fuera poco, Román Arroyo impuso cuatro nuevas marcas centroamericanas (50, 60 y 70 metros, así como en el ranking FITA).

Otra atleta particularmente destacada del contingente puma que se hizo presente en tierras puertorriqueñas fue Fabiola Núñez, quien logró en su primera actuación en estas justas un par de oros. El primero de ellos fue en la embarcación de peso doble abierto junto a Gabriela Huerta con un tiempo de siete minutos, 16 segundos y 17 centésimas. La segunda presea la cosechó en la embarcación cuádruple junto a sus compañeras Analicia Ramírez, Gabriela Huerta y Lila Pérez, tras cronometrar 6: 50.70.

Más medallas de los auriazules

El boliche puma una vez más se hizo presente en el medallero pues Alejandro Cruz, Daniel Falconi y Adriana Ortega contribuyeron a la causa azteca con un par de platas. La primera de ellas fue a cargo de los auriazules Cruz y Falconi, en la modalidad de ternas, quienes, junto a su compatriota Marcos Baeza, totalizaron 3 mil 853 pinos.

Adriana Ortega emuló a sus compañeros y se trajo el subcampeonato por equipos al lado de sus compatriotas María Cornejo, Sandra Góngora, Iliana Lomeli, Adriana Pérez y Lila Robles, quienes sumaron 6 mil 164 bolos.

En canotaje, Agustín Medinilla Ríos se colgó una argenta junto a sus compañeros Osbaldo Fuentes, Santos Marroquín y Alfredo Taméz, en K-4 a mil metros, luego de registrar un tiempo de tres minutos, cinco segundos y 462 centésimas.

En cuanto a la actividad de esgrima, Alejandra Avena, de la modalidad de espada, fue parte del equipo femenil mexicano que se agenció la plata tras caer en la final ante Venezuela por un apretado 26-25.

Getzemani Delgado, en florete, debutó también en estas justas y tuvo una destacada actuación con el equipo mexicano de la especialidad al agenciarse el subcampeonato centroamericano. Dentro de la modalidad sable por equipos, Angélica Larios formó parte del conjunto mexicano que alcanzó bronce tras superar a Panamá con marcador de 45-26.

En cuanto a luchas asociadas, Gloria Wendolline Moreno Sotelo se agenció la medalla de bronce en la división 72 kilogramos.

Asimismo, los pumas Orlando Ortega y Arturo Aguirre formaron parte del combinado mexicano que se agenció el bronce centroamericano en la disciplina de polo acuático. Con el sistema de “round robin” (todos contra todos), México enfrentó seis partidos con saldo de cuatro triunfos y dos derrotas que lo catapultaron a las semifinales.

En esa instancia, México cayó con Venezuela por 13-6, por lo que tuvo que tuvo que disputar el partido por el bronce, el cual ganó 9-7 a Puerto Rico.

Por lo que respecta al voleibol varonil, dentro del conjunto mexicano que logró tercer lugar tras vencer a los locales por tres sets a dos (con parciales de 21-25, 23-25, 25-15, 25-16 y 15-7), el entrenador del representativo puma Sergio Hernández Herrera fungió como asistente del técnico nacional.

Dentro de la justa panamericana, México ocupó el primer lugar del medallero con 133 preseas de oro, 129 de plata y 122 de bronce, para un total de 384.