Carlos Salvador Juárez Franco se ganó el boleto tras ser campeón de la Olimpiada Nacional 2009, así como el primero dentro del selectivo de Toluca " />
Gladiador puma al Campeonato Panamericano Juvenil
Candelaria Chávez
Fotos: Jacobo V. Zavaleta/Emiliano Alvarado
En ambos certámenes, el gladiador puso en alto el nombre de la UNAM tras derrotar al oaxaqueño Gabriel Jonathan Aquino Sosa, quien hasta ese momento ocupaba el podio panamericano juvenil de luchas asociadas, categoría cadetes (55 kg).
Carlos Salvador actualmente estudia el sexto año de bachillerato en la Escuela Nacional Preparatoria cinco José Vasconcelos, tiene 18 años y desde hace cuatro años practica la lucha olímpica. Ha participado en dos ediciones de Olimpiada, en 2007 y 2009.
“Poco a poco he ido forjando mi camino en la lucha. El trabajo y la constancia me han traído aquí, ya que en mi primera intervención quedé en quinto sitio y fue en ese momento que me fije una meta: ser campeón nacional y próximamente panamericano juvenil”, resaltó el bachiller.
El ser estudiante y deportista implica múltiples sacrificios, sin embargo el espigado e introvertido luchador no desacelera su ritmo de trabajo con miras al Panamericano de Guadalajara. Enfrentará a los mejores tanto de México como de Latinoamérica, por lo cual entrena diario en el gimnasio de la Prepa cinco, incluso sábados y domingos, bajo las órdenes de tres profesores: Yvar Langle, Jacobo Mordenshay y José Luis Juárez.
“El equipo que hemos armado ha dado frutos, sobre todo con mis profesores quienes me han apoyado en todo momento. Me exigen bastante, pero saber que todo trabajo tiene su recompensa me impulsa, máxime cuando tienes el éxito”, afirmó Carlos.
Su gusto por la lucha la heredó de su padre José Luis Juárez, quien también la practicó; además tiene un hermano gemelo y un primo que también la practican, siendo Carlos el más destacado.
“El apoyo de la familia es fundamental, sobre todo si hay más de un deportista que practica la misma disciplina. La que no está muy de acuerdo es mi mamá, por ser una disciplina de alto riesgo y por algunas lesiones que he tenido, pero aún así me apoya y está conmigo”.