El deporte universitario cuenta con entrenadores que han puesto en alto el nombre no sólo de la UNAM sino de México en los Juegos Olímpicos. Algunos de estos exponentes abrieron la conversación en el inicio del ciclo El deporte universitario en los Juegos Olímpicos, el cual se transmite a través del canal de Facebook Deporte UNAM.

En distintos años, estos formadores se han encargado de llevar a atletas universitarios al más alto nivel deportivo, con lo cual queda claro que por las aulas de la Universidad Nacional han concurrido diferentes deportistas universitarios que han competido en la justa veraniega, algunos de ellos formando parte de selecciones mexicanas que hicieron historia.

Tal es el caso de Sergio Hernández Herrera y Daniel Vargas Osorio, entrenador y discípulo auriazules que subieron al Olimpo en Río de Janeiro 2016, tras 48 años de ausencia del representativo mexicano en un evento como este. Lo anterior después de un largo proceso desde que el voleibolista Vargas Osorio era un adolescente que comenzó a crecer en el aspecto deportivo gracias a las enseñanzas de su coach.

“Daniel Vargas entrenó conmigo en Ciudad Universitaria, desde los 16 años de edad, cuando se integró al voleibol. Hizo todo su desarrollo deportivo con nosotros en la UNAM y, posteriormente, no nada más competimos representando a esta casa de estudios, sino a México en diferentes competencias internacionales. A mí me dio da la oportunidad de ver cómo iba creciendo él como atleta, su desarrollo técnico-táctico y el nivel que adquirió como deportista de alto rendimiento”, compartió Sergio Hernández, acerca del éxito deportivo que logró junto con el ahora egresado de la Facultad de Ingeniería.

“Jugamos el cuadrangular rumbo a Río 2016 y quedamos en primer lugar, y eso nos dio la oportunidad de clasificar, después de 48 años de no asistir a unos Juegos Olímpicos. Los equipos que vinieron a ese clasificatorio naturalmente que eran muy fuertes, era el campeón y subcampeón de África y el tercer lugar de Sudamérica. Después de tres hits eliminatorios se nos dio esa oportunidad de clasificar, y la verdad valió mucho la pena el estar en Juegos Olímpicos”, abundó Hernández Herrera durante la primera charla del ciclo de 10 conversatorios que concita a las personas que, siendo universitarias, han tenido participación en justas olímpicas.

En esta plática también participó Hilario Ávila Mejía, quien fue entrenador del equipo mexicano de judo en los Juegos Paralímpicos de Beijing 2008, Londres 2012 y Río 2016, teniendo entre sus dirigidos a su hijo Eduardo Adrián Ávila Sánchez, ex alumno de la carrera de Química Farmacéutica Biológica en la Facultad de Química de la UNAM, con quien logró una medalla de oro en China, una de bronce en Inglaterra y otra de oro en Brasil.

Durante Beijing 2008, Eduardo Ávila conmocionó al público tras lograr la marcación máxima de la disciplina de judo, arrebatándole el primer puesto a su rival local, “en el momento que Eduardo consigue la marcación máxima en judo, el estadio se inmutó. Yo estoy muy orgulloso como ser humano y como deportista de él, ha evolucionado y para satisfacción mía es una persona que comparte su alegría y experiencia con la sociedad. Se ha realizado como deportista y fue alumno de la Universidad Nacional”, aseveró Hilario Ávila.

Finalmente, Coriolan Traian Lalú, académico de la Dirección General del Deporte Universitario y director médico metodológico, quien colaboró con la Federación Mexicana de Canotaje y participó con el representativo tricolor en los Juegos Olímpicos de Sídney 2000, Beijing 2008 y Londres 2012, dijo respecto a lo que representa su recorrido olímpico que “el sentido de los Juegos Olímpicos es más un sentido de unidad, de apertura, de ética y respeto que siempre le he tenido a mis atletas y a mis adversarios. La honestidad, la ética y el fairplay es lo que nos caracteriza”.