• Implementos construidos por los alumnos deportistas, con ropa y cuerdas, son la principal herramienta para entrenar en confinamiento.

Autor: Neftalí Zamora
Fotos: cortesía de Mariana León y Gustavo Vázquez

Durante el confinamiento por la Covid-19 el ingenio ha sido el común denominador al interior del atletismo de la UNAM, particularmente en los atletas universitarios que practican lanzamiento. Un ejemplo de ello es cuando algunas prendas de vestir y una cuerda se convierten en la herramienta perfecta para mantener la condición física sin dejar de lado la técnica. 

Mariana León Ochoa, alumna de la Facultad de Odontología, creó un martillo de atletismo utilizando ropa como su principal materia prima, además de un lazo. Y este accesorio es el que utiliza para entrenar en casa. “El no poder entrenar en los gimnasios nos ha afectado. A veces me pregunto ‘¿para qué sigo entrenando si no hay competencias?’, pero recuerdo lo que quiero lograr en el deporte y esa respuesta me motiva para practicar: estar lista cuando vuelvan las actividades presenciales”, comenta la universitaria, quien en 2019 acudió a la Universiada Nacional, Olimpiada Nacional y al Campeonato Nacional de Atletismo de Primera Fuerza. 

Buscar nuevas formas de planeación, métodos y ejercicios para mantener activos a los estudiantes deportistas en esta contingencia, es parte de las estrategias que se aplican en los entrenamientos a distancia de atletismo en general y en la prueba de lanzamiento en particular. 

Claudia Becerril Rivera, entrenadora de esta disciplina, realiza un programa de entrenamiento acorde a las condiciones particulares de cada atleta y al espacio que tengan disponible en casa. El plan personalizado se envía por correo electrónico, describe los ejercicios a realizar y contiene links a videos en donde se muestra cómo hacer determinado ejercicio. Posteriormente, cada deportista se graba realizando el entrenamiento, envía sus evidencias y recibe retroalimentación por parte de la entrenadora. Cada tres semanas se cambia el programa de trabajo, el cual tiene como principal objetivo mantener la buena condición física de los deportistas para que estén listos cuando se dé el regreso a las competiciones presenciales. 

“Se han roto muchos esquemas y se han buscado distintos medios para seguir entrenando. Para el atleta es un golpe fuerte no poder entrenar ni competir, pero los ejercicios en casa les han ayudado a mantenerse motivados y a tener otras actividades además de las clases en línea. En este momento vemos más al ejercicio como una estrategia de salud física y mental, para sobrellevar la situación que estamos viviendo”, comenta Claudia Becerril, quien también es parte del equipo de psicólogos del deporte de la Dirección General del Deporte Universitario. 

Para Gustavo Vázquez Cervantes, quien estudia un posgrado en Ciencias Biológicas, y practica atletismo desde que entró a iniciación universitaria en la Escuela Nacional Preparatoria plantel 2 “Erasmo Castellanos Quinto”, el reto más grande ha sido encontrar el espacio para lanzar. Sin embargo, se las ingenia para hacerlo en su azotea. “Me he adaptado a entrenar con lo que tenemos en casa, después de tantos meses de inactividad por la pandemia es fácil subir de peso y perder el desempeño, por lo que estoy consciente de que debo mantenerme en forma, activo y con una buena alimentación”, subraya. 

Es así como los atletas de lanzamiento utilizan implementos de trapo, simulando una bala o un martillo para mantener ese gesto técnico que es fácil de olvidar tras casi un año sin pisar la pista, con la firme convicción de conservar la forma física y, llegado el momento, mantener en alto el nombre de la UNAM en las competencias presenciales.

Fecha: México DF, 03/12/2020