La UNAM tiene ya a su primer representante en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020: Guillermina García Ávila, de la Asociación de tiro con arco de la UNAM, fue notificada por parte de la World Archery que formará parte del cuerpo colegiado encargado de llevar los destinos de dicha disciplina en tierras japonesas.

“Todavía no me la creo, recibí la notificación el pasado jueves (5 de septiembre) vía correo electrónico y me siento muy contenta pues era un sueño que buscaba y ahora se hace realidad”, señaló la juez internacional puma, egresada de la Facultad de Artes y Diseño.

De esta manera, Guillermina cumple un objetivo que empezó a fortajr en el 2015 cuando acudió a los Juegos Parapanamericanos de Toronto y posteriormente a los Paralímpicos de Río 2016, así como a los campeonatos mundiales además de los Olímpicos de la Juventud el año pasado.

“Fue a finales del 2016, cuando logré acreditarme como juez internacional, condición que me faltaba para ser considerada a Olímpicos; ya con los torneos a los que fui gané experiencia y en el evento de prueba para Tokio 2020, que fue este año, se determinaría quienes acudirían a dicha justa, considero que lo hice bien, por eso es que me llamaron”, admitió García Ávila.

Resta un año para que Guille acuda a sus primeros Juegos Olímpicos y sabe que debe llegar lo mejor preparada posible: “debo mantenerme actualizada, sobre las nuevas interpretaciones o los cambios más recientes a las reglas que llegaran a presentarse durante el año, porque siempre hay algo que cambia”, detalló la juez internacional.

Ya como Juez Internacional estuvo en la World Archery Championships del 2017 en México, lo cual marcó la primera participación de un juez mexicano en un Campeonato del Mundo; además del World Archery Indoor Championships de 2018 en Yankton, Estados Unidos, así como los Juegos Centroamericanos de 2018 en Barranquilla, Colombia.

En su carrera ha sido desde juez de línea hasta directora de tiro y Chairman, éste último sólo en nuestro país, pues a nivel internacional la tiene como asignatura pendiente.