Con la participación de 17 arqueros de los dojos de la UNAM, Pachuca y Teotihuacán, el grupo Kyudo de esta casa de estudios celebró su primera exhibición de fin año el pasado mes de diciembre en las instalaciones del Campo Lauro Franco, donde se mostraron las bondades de esta disciplina.

El kyudo es la más antigua de las artes marciales tradicionales de Japón y está asociada con el Bushido, el código que rige el comportamiento del samurái. Su práctica alcanza un sentido espiritual debido a que, a través de la misma, el arquero expresa la verdad (Shin), la bondad (Zen), así como la belleza (Bi) de su corazón (Kokoro).

El sensei Ali Zolfaghari, entrenador del grupo Kyudo UNAM, fue quien presidió el evento que consistió en clavar la flecha justo en el centro de una diana dorada, la cual es de menor tamaño que la usada en el tiro con arco convencional.

La finalidad es lograr la acción única de expansión (Nobiai) que resulta en un tiro liberado naturalmente; es decir, cuando el espíritu y el balance del tiro son correctos. El resultado es que la flecha siempre llegue al blanco. Abandonarse a sí mismo completamente en esta acción conlleva a evitar malos pensamientos.