Puebla, Pue.- Apenas habían transcurrido no más de cuatro días de la ceremonia de abanderamiento de los deportistas de la UNAM, cuando Fiona Daniela Irish Rojas, quien habló a nombre los atletas ahí reunidos, vio como en un sólo día, todo aquel esfuerzo, sudor y dolor que dejaron las muchas horas de entrenamientos y preparación, a las cuales se refirió en su discurso, se cristalizaban

Ante sus compañeros y el rector, José Narro Robles dijo: “Ha llegado la hora de luchar por nuestro sueño y de reunir todo el esfuerzo, sudor y dolor que hemos pasado en los entrenamientos y competencias previas, para cristalizarlo”. Lo pensó, lo vaticinó y lo cumplió la integrante del equipo representativo de gimnasia aeróbica deportiva de la UNAM.

Y aquel sueño del que habló la estudiante de Arquitectura, no lo es ya más. Ayer, 29 de abril, se convirtió en una agradable realidad. Lo vivió, lo palpó, lo sufrió y disfrutó. Con orgullo y con la frente en alto puede decir: misión cumplida. Fiona es hoy campeona nacional estudiantil de gimnasia aeróbica, en las modalidades de Individual femenil, por parejas, así como subcampeona en tercias. El sueño se hizo realidad y no podía haber sido mejor.

“Me siento súper bien, en esta competencia logré realizar elementos y rutinas que no había ejecutado antes. Estoy muy contenta por las dos medallas de oro y la de plata. Mi pasión es la gimnasia y representar a la UNAM es muy grato para mí y por ello, me siento muy feliz”, señaló con una amplia sonrisa.

Al lado de su amigo de toda la vida, con quien desde pequeño ha compartido torneos y certámenes, Juan José Quiroz Hernández (FCA), su coequipero en la modalidad de parejas y junto con él y Magín Calvillo Flores, en tercias, Daniela no cabe de felicidad.

El escenario donde hizo realidad este sueño fue el gimnasio de la Facultad de Cultura Física de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. El certamen: la Universiada Nacional 2014. Ahí, en una maratónica sesión, Fiona compitió en la modalidad de individual femenil y con una calificación de 18.900, superó a sus adversarias de la Universidad Autónoma de Sinaloa (con 18.800) y de la Autónoma de Nuevo León, que acumuló 18.400.

Luego, en parejas, con Quiroz Hernández, acumularon 18.750 unidades y superaron a los mismos rivales (UAS y UANL), quienes se quedaron con el segundo y tercer lugar, respectivamente, con 18.600 y 18.350.

En tríos o tercias, fueron superados por la Autónoma de Coahuila (19.200). La UNAM tuvo 18.780 y el bronce fue para los Tigres, con 18.600.

Logramos medalla en todas las modalidades que traíamos (aerodance, grupo, en las dos individuales, en la pareja y en trío). Creo que fue una actuación redonda, es un muy buen resultado. Como equipo, fue sensacional lograr esto. Las chicas de aerodance y grupo hicieron un magnífico papel y llevaron a cabo evoluciones y ejecuciones nuevas.

“Todos juntos, logramos superarnos. Eso también es de lo que se trata el deporte. De aprender de lo que has hecho antes, de tus errores. Avanzar y seguir adelante”. Y se refiere a sus compañeras Citlali Aupart Hernández, de Derecho; Estefanía Shantal Franco San Juan y Alejandra Itzel Ortega Escobar, ambas de Química. Así como Arianna Rosales Amador, de Psicología y Paulina Vázquez Beristáin, de Ciencias Políticas y Sociales, además de Magín Jonatán Calvillo Flores, de Contaduría y Administración.

Todos ellos, comentó Fiona, lograron una cosecha de dos medallas de oro, dos de plata y dos de bronce, lo que les valió llevarse el trofeo como campeones por equipos, en este certamen y “la felicidad que irradiaban nuestras entrenadoras Luz Delfín Eroza y Araceli Ramírez, no cabía duda: era de una gran satisfacción

El sueño de Fiona, es el sueño de muchos atletas universitarios. Ella lo pensó, lo vislumbró, lo escribió, lo dijo en su discurso y lo vaticinó…su sueño se volvió realidad y al menos por hoy, no desea despertar de ese sueño…tres medallas, cuelgan de su cuello.