Juan Carlos Cabrera, a conquistar tierras tapatías

Con solo dos años y ocho meses en la disciplina de remo, el estudiante de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales se ganó su boleto a los Juegos Panamericanos de Guadalajara

Emiliano Alvarado
Fotos: Álvaro Paulín

 

En la vida no hay secretos para el éxito, si quieres triunfar es solo cuestión de dedicación, entrega y compromiso. Juan Carlos Cabrera, de la disciplina de remo, ha tenido muy claro esa premisa y ahora, con apenas dos años y ocho meses practicando su deporte, ya es un flamante seleccionado nacional que participará en los Juegos Panamericanos de Guadalajara.

La carrera deportiva de Juan Carlos tomó un giro de 180 grados. Cuando era más joven el futbol americano era su pasión; ahora, a casi tres años de no practicar el deporte de las tackleadas, el remo se ha convertido en su vida, a sus 18 años el auriazul tiene la convicción de conquistar tierras tapatías.

“La verdad es que me siento muy bien, fue un proceso muy distinto al que muchos esperaban, con evaluaciones cada 40 días. Estoy muy contento por estar en la lista que integra, junto con otros compañeros de la UNAM, a quienes representaremos a México. Las institución aporta un buen número para el equipo nacional”, explicó con una gran sonrisa.

Un proceso largo vivió el universitario para ganarse su boleto a la justa continental. Evaluaciones por parte de la Federación Mexicana de Remo cada 40 días; una participación en la Copa del Mundo sub 23; además de tomas selectivas de 2 mil metros, realizadas en Cuemanco con su equipo, han sido los obstáculos que ha sorteado para ser parte de la selección mexicana.

Aún no se define cuáles serán las embarcaciones en las que el atleta de la UNAM competirá en Guadalajara; sin embargo, ha estado entrenando en el bote 4x100, en el cual, según el entrenador universitario y auxiliar de la selección nacional, Pablo Ortiz, tiene muchas posibilidades de subirse al podio de ganadores.

Para esto se medirán con países potencia en esta disciplina a nivel continental como Cuba, Canadá, Brasil, Estados Unidos y Argentina, por lo que necesita trabajar aún más para poder hacer algo importante en la fiesta deportiva más importante del continente.

“Lo que dice el entrenador es que necesitamos afinar detalles técnicos; los cuatro de la tripulación debemos tener un avance continuo, una buena técnica, para ser más eficientes en el remo; dosificar más el esfuerzo, para que después podamos dar un plus en el cierre. Son detalles que nos ayudan mucho a colocarnos en buena posición o a quedarnos en el camino”, explicó, el estudiante de primer semestre de la carrera de Ciencias de la Comunicación.

La disciplina que le dejó en su vida el haber practicado futbol americano la refleja en cualquier aspecto de su vida. Sus convicciones por destacar en lo que se proponga, dejan ver que Juan Carlos Cabrera tiene claro que el estudio es parte fundamental para trazarse un futuro, y que del deporte no se puede vivir; además, hizo hincapié en su compañera de selección y también universitaria Fabiola Núñez, a quien la toma como un ejemplo a seguir.

“Si vamos a poner en alto a la UNAM en el deporte, también lo debemos hacer en lo académico. Yo no creo en esa idea de que los deportistas no pueden con la escuela. En casa tenemos el ejemplo de Fabiola Núñez, que fue una inspiración para muchas personas. Ella estudiaba medicina y practicaba remo al mismo tiempo y vemos ahora el nivel en el que se encuentra, no hay pretexto para no hacer bien las cosas”, argumentó.

Este año, el universitario ingresó a la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales en Ciudad Universitaria, y no ha sido fácil combinar el estudio con el deporte. Afortunadamente se ha podido organizar muy bien y ahora entrena en las mañanas, terminando se va a la escuela, para después regresar a la sesión de entrenamiento de las tardes y finalmente llegar a su casa por las noches.

“Martes, jueves y sábado tengo una sesión de gimnasio y otra de remo. El resto de los días consisten en trabajo de velocidad y remo largo, son dos sesiones al día y abarcan entre cuatro y cinco horas diarias ya en conjunto, todo esto aparte de la escuela. Regreso a mi casa a las ocho de la noche y después me pongo a hacer tarea, porque es un compromiso que tengo conmigo, el equipo y la UNAM”, afirmó.

De aquí a que comience la justa continental, Juan Carlos Cabrera tendrá otras pruebas de evaluación para saber en qué parte de su proceso está. Por lo pronto, el atleta felino no se confía porque el estar en la lista “no significa que tengamos que dejar de entrenar o que ya puedes empezar a faltar, no, creo que cuando ya te consideran es cuando más debes de apretar”.

Y finalizó señalando que tiene la convicción de colgarse una medalla panamericana.

México DF, 12/09/2011

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