Valeria Miranda, mundialista y bronce panamericano

• La futbolista auriazul disputó el Mundial Femenil de la FIFA y logró el metal broncíneo en los Juegos Panamericanos, ambos en Toronto

Rodrigo de Buen
Fotos: Jacob Villavicencio y FEMEXFUT

 

Para Valeria Aurora Miranda Rodríguez, alumna de quinto semestre en la Facultad de Psicología, el verano 2015 fue de experiencia y recuerdos que considera la han hecho crecer y madurar, tanto en el plano personal, como en el futbolístico y deportivo.

A sus casi 23 años de edad, esta joven deportista universitaria, vivió la experiencia de haber jugado un Campeonato Mundial de futbol y saborear, nuevamente, las mieles del pódium en unos Juegos Panamericanos.

Antes de esto, Valeria contaba en su maleta con la experiencia de haber estado en dos campeonatos mundiales de futbol sub-20, Alemania 2010 y Japón 2012, además de unos Juegos Panamericanos (Guadalajara 2011) y una Universiada Mundial (Shenzhen, China, 2011). Este año, un mismo país (Canadá), dos experiencias distintas: la Copa Mundial de la FIFA y los Juegos Panamericanos, en Toronto, donde a la postre, consiguieron la medalla de bronce.

“Sin duda, todo el trabajo que hubo, previo a estos dos torneos, tuvo su recompensa. Fueron muchos meses de concentraciones, entrenamientos, viajes y partidos. En ello, sacrificas muchas cosas, como el estar con tu familia o tus amigos, dejar tu país. Pero todo ello, cuando ya pasó y te sientas un momento a reflexionar lo vivido, te das cuenta que valió la pena. Acumulaste experiencias que atesoras y forman parte de tu vida y eso es lo que ocurrió ahora, en estos meses previos a las competencias y en las mismas”, comentó.

En el mundial, México quedó fuera en la ronda de grupos, luego de empatar 1-1 con Colombia, caer 1-2 con Inglaterra y 0-5, ante Francia. En todos los partidos estuvo presente la futbolista auriazul, sólo entró de cambió en el duelo ante las inglesas, en los demás fue titular.

Y en los Juegos Panamericanos, Valeria fue titular indiscutible en cada uno de los juegos que disputó México. El camino al bronce comenzó con derrota ante las colombianas por 0-1. Vinieron triunfos ante Argentina (3-1) y Trinidad y Tobago (3-1), en la ronda de grupos. En semifinal, México cayó 2-4 con Brasil. Y en el partido por el tercer lugar, contra las anfitrionas canadiense, las mexicanas se impusieron 2-1.

“En el Mundial nuestra actuación no fue la que hubiésemos querido y nos dejó un sabor triste y amargo. Pero el deporte te otorga revanchas y la oportunidad de redimirnos y volver a confiar en nosotras mismas, como equipo, la tuvimos a la vuelta de muy pocos días, en los Panamericanos”.

Como en la vida misma, “aprendimos esto de caerse y volverse a levantar. Es parte de las experiencias y enseñanzas que esto nos dejó. La idea de mejorar y crecer, dando nuestro mejor y máximo esfuerzo, nos permitió alcanzar el pódium y de alguna manera, nos dejó contentas, más no satisfechas”, dijo.

Valeria Miranda asegura quedarse con cada cosa que vivió. “Atesoro cada momento que me ha tocado vivir. Todas esas experiencias me han hecho crecer y madurar como persona. En este andar dentro del futbol, me faltaba jugar un mundial de mayores. Ahora, mi meta es poder estar en unos Juegos Olímpicos, y desde ahora, nos prepararemos para alcanzar esa meta, el próximo año. El sueño de todo deportista, es poder representar a su país en unos JO y vamos a buscar cumplir ese objetivo”, aseguró.

Para Miranda Rodríguez, las oportunidades que la vida le ha puesto, le han forjado el temple y carácter que le identifica. Es una joven mujer que se declara feliz y optimista ante los retos que el futuro le depare. “Busco seguir creciendo, tanto en lo futbolístico como en lo académico. Ampliar mis horizontes y estoy en busca de ello”.

Sabedora de que su amplio palmarés dentro del futbol femenil, le ha costado mucho sudor y esfuerzo, Valeria, quien inició desde los 8 años su andar futbolístico en los campos de la Organización Pumitas, hoy por hoy, se muestra agradecida con dos pilares importantes de su formación: la UNAM y su familia.

De la primera, no duda al señalar que “la Universidad Nacional me ha dado todo. Me ha visto crecer como persona. Desde Pumitas, mi escuela (CCH, Faculta de Psicología), mi equipo de futbol, en fin, todo. Le tengo un amor muy grande a estos colores y a esta camiseta. He estado en muchos torneos internacionales. Y siempre he dicho que no voy representando a Valeria Miranda. Representas a México, de dónde vienes, y a quienes te apoyaron para poder llegar ahí. Literal, se lo debo a Pumas, a mi equipo, a mis entrenadores.

“Y por supuesto, a mi familia. Han aguantado cada hora de entrenamiento, cada minuto que no hemos estado juntos, cada domingo de levantarse temprano para ir a alguno de mis partidos, desde niña, hasta el día de hoy. Para ellos, es esta medalla, todo esto es y ha sido por y para ellos”. Por eso, la presea en Toronto, se la dedicó a Sara Susana Rodríguez y Roberto Miranda, sus padres. Además de sus hermanos Sebastián y Jerónimo Roberto.

México DF, 03/08/2015

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